¿Qué le gusta (recibir) a un cliente cuando pide un presupuesto?

El mundo actual se mueve cada vez más hacia las relaciones virtuales. Prácticamente casi toda empresa o comercio que se precie tiene su portal en internet e incluso muchos negocios existen exclusivamente en este ámbito. Esto ha causado que las relaciones proveedor de servicios-clientes haya cambiado. Ahora es todo más visual y vitual…la distancia no es problema…pero puede acabar siéndolo si no cuidamos ciertos detalles.

El centro comercial en nuestro ordenador

El cliente accede a una serie de páginas virtuales en las que puede  elegir modelo, colores, tamaños…todo mediante un simple clic. Al finalizar la elección, el cliente accede a una zona de máxima seguridad de protección de datos, inserta su número de tarjeta de crédito, sus datos personales y ¡listo!. A esperar los días estipulados a que le entreguen en casa el objeto u objetos comprados. Y esta manera de comprar es extensible a todos los ámbitos de negocio, ya que incluso para instalaciones de mayor envergadura o de más valor económico, el cliente dispone de una sección en la que pedir presupuesto sin ningún tipo de compromiso, en diversas empresas de todo el territorio nacional, dedicadas a la tarea que el potencial cliente desea llevar a cabo.

1er factor por tanto; pide seguridad

Solicitando un presupuesto

Supongamos que el cliente, tras visitar diversos locales comerciales, desea igualmente pedir presupuesto, por internet, a otras empresas de la zona dedicadas al sector. ¿Qué debería hacer el cliente?

Antes de nada, es recomendable que el cliente sepa ya con cierta seguridad qué desea hacer concretamente. Ya sea comprarse un vestido, cambiar los neumáticos de su coche o instalarse una parabólica en su casa, lo ideal es que sepa qué objeto y modelo concreto desea, así como un precio estimado de la operación. Decimos esto porque una vez en internet, en foto, todo cuánto se observa parece más grande, bonito, brillante y potente que lo que en realidad resulta ser. Y si no tenemos una idea clara de lo que deseamos es muy posible que acabemos comprando o contratando algo que al recibirlo no nos guste o no cubra nuestras expectativas.

Por ello, segundo factor que debemos de ofercer es : calidad. Si no; es posible que compre una vez pero no vuelva a hacerlo posteriormente.

Una imagen no vale más que mil palabras

Por ello y para evitar llevarnos esa decepción y los instaladores o proveedores sentirse mal al percibir nuestro descontento, debemos tener en cuenta que en el tema de las compras lo recomendable es acudir a un comercio físico en el que ver, tocar, medir y comparar los objetos que deseamos adquirir. Y ya una vez que hayamos decidido, entonces sí podemos acudir a empresas virtuales a solicitar el precio por el que nos venderían un objeto similar. De otra manera acabaremos siendo víctimas de espejismos.

Esto, obviamente no gusta en absoluto a las tiendas físicas; a las que les recomendamos que, para evitarlo; ofrezcan y vendan experiencias. No experiencia del vendedor, que también, sino la experiencia de comprar en directo. El vendedor online, por lo general, tenderá a ofrecer mejores precios…pero tengamos cura con ello, es to no es siempre así…y lo barato…suele salir caro. Busquemos nuevamente oferecer calidad, sea on u off line.

Objetividad, compromiso, seriedad

Pues bien, tras haber hecho un pequeño tour por diversas empresas físicas y otras virtuales, disponemos de una variedad de presupuestos en nuestras manos. ¿Cuál de ellos elegir?

Por lo general, desconfía de los que ofrecen igual servicio u objeto a precios sorprendentemente bajos pues “nadie regala duros a cuatro pesetas”, como dice el dicho. Las empresas se crean para hacer dinero, no para ayudar socialmente con obras de caridad. Si lo ofrecen tan bajo es porque parte del servicio no lo han contabilizado y acabarán añadiéndolo más tarde, o porque prescinden de productos de calidad, personal cualificado o incluso el objeto puede tratarse de una falsificación o proceder de un robo. Sabemos desde Geocomunicacion.com y OPEN buzoneo Madrid que esto puede suceder excesivo; pero las compras por internet están tan o más globalizadas como para englobar este tipo de productos. Depende de dónde compremos. Depende la calidad y seguimiento de los productos puestos  a la venta y de sus partners.

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 De acuerdo con el título de este párrafo; ofrezcamos Objetividad, compromiso, seriedad desde el primer momento. Y seamos consecuentes con lo prometido…ya que es lo que espera y una razón, posiblemente la más importante, del por qué nuestro cliente nos compró : Y eso espera.

No dudes en preguntar cuánto necesites

Y sobre todo, antes de aceptar nada, pregunta cada duda que tengas (ya sea contratándolo virtualmente o en un negocio, físicamente). Insiste en que te detallen todo perfectamente, desde el precio por hora invertida en la instalación hasta el modelo concreto del objeto que vas a adquirir, si los costes del transporte se incluyen, si pagarás de una vez o a plazos (y en ese caso, qué importe concreto cada vez), que garantía te dan al objeto, si dispones de días de prueba o incluso las condiciones en que podrás devolver el material adquirido o el servicio por contratar.

Punto final: ofrezcamos información. Detalles, seguimiento…comunicación en definitiva.